Cultura de la innovación
"...En América Latina todos los jóvenes no pueden citar el nombre de un científico de su país, pero sí los de los futbolistas que conforman la selección nacional, porque todos quieren ser el próximo Messi o el próximo James y eso es un problema, porque si tú tienes 10 millones de niños en tu país que quieren ser la próxima estrella del fútbol, no tienes 10 millones de niños que quieren ser premio nobel de Física y difícilmente vas a generar en tu país un premio nobel" ...
Así (textualmente) lo dice Andrés Oppenheimer al hablar de su libro 'Crear o Morir', donde narra sus experiencias en países y empresas que innovan constantemente y como ello contagia a los jóvenes de cada región. Algo análogo en nuestro país sería el caso de Gastón Acurio, al quien luego de poner en valor a nuestra gastronomía, se le adjudicó también como el abanderado de una carrera que hasta entonces no era valorada y que ahora muchos jóvenes la siguen con orgullo.
Sería lo máximo si, así mismo, contáramos con el apoyo de los medios para promocionar los logros de nuestros campeones mundiales de matemática, ciencias y de otros deportes donde SÍ GANAMOS medallas de oro; fomentando de esa manera el amor a las ciencias, a la investigación, al esfuerzo por salir adelante y no por el facilismo y vanalidad que nos venden ciertos programillas de la TV.
Vuelvo a insistir: no basta con enseñar la teoría de la innovación sino de implementar una cultura que haga de nuestros niños y jóvenes verdaderos innovadores, capaces de generar productos, servicios y modelos de negocio que cambien radicalmente -para bien- el mundo que les ha tocado vivir ... Sigamos luchando.